INDICE DE CONTENIDOS

22 - ENSAYO SOBRE EL DON
21 - POR UN FEMINISMO DE LA RECUPERACION
20 - LO QUE SE OCULTA TRAS LA CUESTION DEL
VELO ISLAMICO .
19 - LAS SERRANAS (primer avance)
18 -EL CREACIONISMO Y LA DOMINACIÓN:
VIGENCIA DE KROPOTKIN
17 - LOS LIMITES Y LA COMPLACENCIA
16 - A LA VERDAD - Lope de Vega
15 - D. Quijote explica a unos cabreros la edad dorada y se declara defensor del modo de vida de las mujeres en aquellos tiempos (Miguel de Cervantes)
14 - LA DEGENERACIÓN DE LA RAZA HUMANA POR LA
PÉRDIDA DE SUS CUALIDADES FUNDAMENTALES.
13 - ¿DÓNDE ESTA WALLYS? (un juego semántico)
12 - EL EQUIVOCO DE NIETZSCHE
11 - El abrazo materno y el continuum del sistema sexual de
la maternidad: a proposito del Metodo Madre Canguro
10 - PARTO ORGASMICO: testimonio de mujer y
explicación fisiológica.
9 - Sobre la función orgánica y social de la sexualidad (I)
8 - Hace falta una Declaracion Universal de la Condicion
humana.
7 - Aunque el fascismo se vista de seda, fascismo se queda.
6 - Tres versos de Lope de Vega
5 - Nota aneja al libro Pariremos con Placer (2ª edición)
4 - El deseo materno existe y hay que decirlo
3 - Amamantar por placer (reseña de un libro)
2 - ¿Domina el sistema neurológico los demás sistemas del
cuerpo? - Las cosas como son y las palabras para decirlo
1 - Objetivos de AMARYI



martes, 16 de junio de 2009

EL EQUIVOCO DE NIETZSCHE


Para hacer grandes cosas es preciso ser tan superior a sus semejantes como lo es el hombre a la mujer, el padre a los hijos y el señor a los esclavos.
(...)
La guerra es, en cierto modo, un medio natural de adquirir, puesto que comprende la caza de los animales bravíos y la de aquellos hombres que, nacidos para obedecer, se niegan a someterse; es una guerra que la naturaleza misma ha hecho legítima.
(...)
La naturaleza… ha creado unos seres para mandar (arkhos) y otros seres para ser mandados (arkhomenes : forma pasiva del verbo arkho).
La Política, Aristóteles.


En noviembre de 1982 escribí una carta al Director de El País, pidiendo que ante la agonía del comunismo, algún filósofo o filósofa que tuviera tiempo para dedicarse a estas cuestiones, abordara la lectura de la obra de Nietzsche que dio lugar al nacionalsocialismo alemán de los años 30. Que era una tarea urgente para resistir frente a la civilización de los superhombres que amenazaba con nuevos holocaustos para nuestros hijos. Mi preocupación entonces no tenía una base racional, pero las células de mi cuerpo habían identificado la naturaleza del daño y del sufrimiento que estábamos padeciendo.

El equívoco de Nietzsche fue tratar la moral judeo-cristiana, una moral para propiciar la resignación y la sumisión, como si fuera la única moral contraria a la vida. Cronológicamente anterior a la moral judeo-cristiana, (y también lógicamente anterior), fue la moral que afirmó como lo bueno la voluntad y la capacidad de dominio de unos seres humanos sobre otros, y estableció como modelo de humano-superior el que ejercía tal voluntad de dominio sobre sus semejantes, proclamados sus inferiores; una moral que legitimó el uso de la fuerza para la conquista y el saqueo, como medio 'natural' de adquirir bienes, y como medio para mandar, debilitar y eliminar cuando fuera preciso, al débil e inferior. Con palabras de Amparo Moreno Sardá (1), lo que apareció en primer lugar, fue un decir en contra de las aspiraciones y la capacidad humana de entendimiento, en el que se fundamentó la valoración positiva de la voluntad de dominio de unos seres humanos sobre otras y otros hombres y mujeres. Ruth Benedict lo llamó dogma conceptual original.

La civilización patriarcal no se define por el dominio de los hombres sobre las mujeres, sino por el tipo de ser humano, masculino y femenino, que hace posible tal dominación. La obra de esta civilización, que Amparo Moreno explica lúcidamente, y a la que me remito para quienes quieran un mejor entendimiento, fue identificar lo humano con el arquetipo humano patriarcal, y hacer un dogma de ello, el dogma al que se refiere Benedict.

Nietzsche no fue más allá de la moral patriarcal, porque no había entendido la vida; siguiendo el sistema de valores patriarcal, consideró una debilidad humana lo que es su mayor fuerza: su capacidad de autorregulación y de automantenimiento; y allí donde había una función social de cuidado de la etapa primal de la vida, vio una debilidad y una inferioridad social. No entendió que el mantenimiento de la vida implica el nacimiento y el crecimiento, y que los grandes árboles como los hombres robustos, antes tienen necesariamente que ser pequeños, y tienen que ser gestados, cuidados y protegidos por sus congéneres, y que no por ello, ellos o sus madres son inferiores al hombre robusto y hercúleo; son sólo diferentes etapas y momentos de la misma vida humana. Condenar la sexualidad femenina y debilitar a las mujeres fue la gran heroicidad de nuestros primeros patriarcas. El sistema de valores patriarcal es un manual de misoginia, y Nietzche fue junto con Schopenhauer un adalid de la misoginia en pleno siglo XIX.

Con la nueva moral del patriarcado primitivo aparecieron los dioses masculinos que habitan los cielos, y un nuevo orden simbólico, centrado en el culto al Sol, que como fuente de energía extraterrenal se presentaba en contraposición a la energía de la vida terrestre y de la sexualidad que impulsaba la vida humana. No fue una elección casual identificar el Sol con la fuerza y la nueva noción de superioridad. El diccionario Larrousse, en la voz Sol dice: objeto de culto de todas las civilizaciones antiguas que generalmente se simbolizaron en unas divinidades determinadas. Las llamadas religiones heliopónticas, fueron propagadas por los arios e indoeurpeos y las extendieron en su expansión territorial en el tercer milenio a.c., promocionando su consideración de lo bueno y lo malo que legitimaba el nuevo modelo de ser superior. Así proliferaron las divinidades solares masculinas: Mitra, Suria, Sashmesh, Khrisna, Tammuz, Horus, Ra, Baal (o Bel), Lugus (o Luch), etc., y sus diosas consortes, Tanit, Isis etc. Pero además de las deidades propiamente solares, los grandes dioses de las distintas culturas adquieren el apellido de ‘solar’, como el Júpiter Heliopolitano.

Los mitos de dioses y héroes solares que matan a las serpientes y dragones, representantes de la sexualidad femenina, explican el cambio de civilización y de moral. Al mismo tiempo que la serpiente se convierte en monstruo y demonio, otro símbolo también es arrebatado a las viejas culturas prepatriarcales entregadas al cultivo y recreación de la vida: las dobles espirales cruzadas que pasaron de símbolo de la sexualidad a ser el símbolo del Sol.

El cambio de significado de las dobles espirales cruzadas, acontecido en los comienzos del patriarcado primitivo, es el origen de la esvástica, el nombre con el que hoy se la conoce, y que es un término de etimología sánscrita, por lo que la enciclopedia Espasa localiza su origen en la India, confundiendo, creo yo, el orígen del término con el orígen del símbolo. No fue casualidad que el nacional-socialismo, en tanto que la más absoluta expresión de la dominación sobre la vida, y que por ello ha sido y sigue siendo la más cruenta manifestación del patriarcado, adoptara la esvástica como su símbolo. (¿Quizá también por ello el himno de la Falange española empieza con el 'Cara al Sol', o la ETA se llama también EKIN, que quiere decir 'sol' en euskera?)

Hay una palabra que muestra esta identificación del culto solar con la dominación, en el patriarcado primitivo: ‘baal’; el dios Baal de los semitas, uno de los dioses solares más conocidos, por las menciones que se le hacen en la Biblia y por la ciudad de Baalbek (que en la era grecorromana se la llamó Heliópolis, donde se rendía culto al Júpiter Heliopolitano). Pues bien, ‘baal’ también se usaba para expresar la relación de dominio o de propiedad sobre las cosas y personas; y así se decía que el marido era el ‘baal’ de la esposa, o tal señor el ‘baal’ del campo.

En Oriente, las religiones que se establecen para hacer encajar de forma pasiva la sumisión y la estratificación social, no rompieron con las primitivas religiones solares y conservaron el culto a la superioridad y a la jerarquía, junto a sus símbolos (el Sol, la esvástica), añadiendo elaborados mecanismos de aceptación de la condición de cada rango, y refinadas técnicas sublimación de la sexualidad, tan eficaces que hoy se están propagando en Occidente también.

El estudio de la genealogía de la moral patriarcal nos lleva desde nuestra moral de la resignación cristiana a la moral de la dominación, es decir, al dogma conceptual original, y nos hubiera permitido entender su contenido genocida: su decir en contra de todos los ingredientes que componen la capacidad de entendimiento de los seres humanos: en contra de la capacidad orgástica humana, en contra de las pulsiones sexuales, en contra de la verdadera maternidad y, finalmente, su decir en contra de la palabra, que también, con la generalización de la mentira, nos ha sido arrebatada.

Decía Miguel Delibes de Castro (Público, 25.05.09), que estamos viviendo la sexta extinción masiva, y que esta vez el meteorito somos nosotros (haciendo referencia al impacto del meteorito que al parecer provocó hace 65 millones de años la quinta gran extinción, en torno del 60/70 % de las especies). Es decir, esta vez el meteorito somos la misma especie humana que hemos levantado una civilización que cortocircuita mecanismos de la autorregulación de la vida en general, y de la humana en particular: ¡así somos de tontos!

Me viene a la memoria un slogan publicitario de un producto de Coca-cola que decía: la naturaleza es sabia pero no tanto, resumiendo el engreimiento y los delirios de grandeza de quienes creen que su inteligencia artificial es superior a la naturaleza, y que pueden contradecirla a conveniencia de sus intereses

El equívoco de Nietzsche se concretó en un ‘hay que pasar de moralinas’ y sirvió de excusa para utilizar cualquier método en pro del nuevo paradigma de hombre superior. Pero matar y mentir, emplear la mentira como arma de destrucción masiva, no son cuestiones de moral o de ‘moralinas’ de tal o cual cultura o religión inventadas por la humanidad, sino que son simplemente contrarias a la vida.

Más allá del bien y del mal judeo-cristiano y de la moral de los superhombres está la autorregulación de la vida que tiene sus propios mecanismos sensibles de percepción: el placer que indica su buen funcionamiento (lo bueno), y el dolor que indica que algo va mal (lo malo). La justificación del sufrimiento, de la mentira y de la muerte no es una moral de la vida sino de la dominación.

Casilda Rodrigáñez Bustos 16 junio 2009

(1) Amparo Moreno : El arquetipo viril protagonista de la historia, laSal edicions de les Dones, Barcelona 1987; y La ‘otra’ política de Aristóteles, Icaria, Barcelona 1988.
 



viernes, 5 de junio de 2009

EL ABRAZO Y EL CONTINUUM DEL SISTEMA SEXUAL MATERNO: EL ABRAZO MATERNO NO ES UN METODO


El pasado 2 de junio salió en El Pais este articulo, que también esta circulando por nuestras redes. Las personas no informadas pensarán, que qué bien, que la criatura esté con su padre y no en manos de un personal sanitario que le aplica un protocolo de inspección clínica. Y yo creo desde luego que es un mal menor para la criatura. La pregunta es ¿por qué no se hace el tipo de cesárea con anestesia epidural que se ha comprobado permite a la madre estar consciente y recibir ella misma a su bebe?

Nils Bergman (2002) dice que para la criatura al nacer sólo hay dos situaciones posibles, que resume con un juego de palabras: ‘mother’ y ‘other’ (‘madre’ y ‘otros’); y lo hace para trazar una línea divisoria que deja claramente definido el único hábitat que la criatura reconoce como adecuado y tranquilizador, el cuerpo de su madre; y que el estar sobre cualquier cosa o persona que no sea su madre no lo reconoce y le produce stress. Bergman insiste en ello aunque es obvio que los grados de stress pueden ser muy diferentes, y la gravedad de los impactos correspondientes también; y que es mejor que escuche voces familiares, aunque su principal fuente sensorial que en esos momentos guía sus impulsos, el olfato, esté recibiendo señales irreconocibles.

Creo que si Bergman centra su explicación en la dicotomía mother/other (madre/otros), es porque si dedicamos nuestro esfuerzo y nuestro trabajo a reducir el mal menor del ‘other’, podremos incluso sin quererlo, estar de hecho participando en el mantenimiento del mal esencial, la eliminación de la madre, por utilizar una expresión de Odent.

Lo peor de la dominación y del sistema represivo no es la conducta que impone sino la que impide que se desarrolle. (Lo segundo peor es que la devastación se produzca de manera invisible, porque entonces no se puede actuar conscientemente para evitarla).

Y lo que se impide con la eliminación de la madre es el normal desarrollo del sistema neuro-endocrino-muscular del que depende todo el metabolismo basal de la criatura recién nacida, convirtiendo un proceso natural en un proceso patológico (Bergman 2002). Además, al bloquear el sistema de la criatura, también se bloquea el de la madre con lo que también se bloquean los sistemas de retroalimentación y autorregulación mutuos. En cambio, la introducción de la patología sirve para retroalimentar la intervención de la medicina. Así se produce el sabotaje de la función femenino-materna y de la vida humana en su etapa primal.

Por ello, dice también Bergman (2005), cualesquiera que sean las circunstancias, lo peor que le puede suceder a una criatura al nacer es no ser recibido por su madre, y permanecer separado de ella. Y también sabemos que la cesárea no tiene por qué ser un motivo que impida que la madre abrace a su criatura desde el momento en que es extraída del útero.

Seguimos pues con todo tipo de excusas en nombre de la ciencia para la eliminación de la madre (Odent), aunque la ciencia ya haya probado que dicha eliminación es una violación del cuerpo de la criatura (Bergman 2005)).

Asi es como llegamos a esta propuesta del método madre canguro, aliado de un tipo de cesárea que físicamente elimina a la madre. Césarea y método madre canguro se convierten en otra fórmula para ejecutar el matricidio moderno.

La conversión en España del Kangaroo Mother Care en el Metodo Madre Canguro no es inocente. El Método Madre Canguro, a diferencia del abrazo materno, lo puede practicar cualquiera, convirtiéndose en otro ritual de interferencia del continuum del sistema sexual materno y del acoplamiento de la díada madre-criatura.

El abrazo materno brota del interior del cuerpo materno, y es el único cuerpo que puede producirlo; no tiene nada que ver con método alguno, funciona por el propio impulso del deseo y tiene su propia sabiduría.

La diferencia entre el abrazo definido por el método y el abrazo que brota del impulso interior, la experimentamos a menudo y es fácil de reconocer; es la diferencia entre un abrazo o un beso que se da porque nos sale de dentro, y un abrazo o un beso que se da en cumplimiento de una formalidad convencional, socialmente establecida.

El beso y el abrazo que recibimos nos alcanza de modo diferente según el deseo de quien nos besa y nos abraza. No hacen falta palabras para saber si un beso es un protocolo formal o si hay algo de deseo y de afecto verdadero; nadie nos tiene que decir la intensidad y matices del deseo de quien nos abraza y nos besa, ni tampoco medir la cantidad de oxitocina en la sangre para saberlo. Aunque en el caso de la maternidad, sí se han medido las descargas de oxitocina en la madre inmediatamente después del parto y sabemos todo lo de la impronta, etc... A pesar de lo cual parece que da igual que sea un cuerpo que otro, puesto que no se trata de que actúe el sistema sexual del continuum materno, sino de seguir un método; un método que puede seguir cualquiera, incluso el cuerpo más disciplinado y aséptico.

Y así nace una nueva función patriarcal del hombre y una nueva legitimación de la eliminación de la madre: practicar el método madre canguro. Como dice Victoria Sau, ¡la madre ha muerto! ¡viva el Padre! (Y como diría Agustín García Calvo: ¡Pobres hombres!).



P.D.

.



1) Las referencias de Nils Bergman son:
* 2002 : Restoring the original paradigm: documental en inglés
que se puede conseguir a traves de La Liga de la Leche (Francia) o

Existe una versión en castellano que se
puede descolgar en Youtube, en seis partes:

Nils Bergman Restaurar el Paradigma 1, 2, 3, 4, 5 y 6.

Hay que advertir que en esta versión en castellano hay dos
errores de traducción:
- uno de ellos es que a veces el 'care' inglés (= 'cuidado' en castellano)
se ha traducido por 'método';

- el segundo error es la traducción del 'niche' inglés (= 'nicho' en
castellano). En biología el nicho es el conjunto de funciones
que una especie realiza en su hábitat correspondiente;
Bergman utiliza estos conceptos para explicar que la
relación madre/criatura es una relación de habitat/nicho, puesto que
un bebe recien nacido solo puede desarrollarse con normalidad
en su habitat, el cuerpo materno; pues este 'niche' inglés se ha
traducido por 'nido', trastocando muchas explicaciones.

.
* 2005 : Le Portage Kangaroo, Jornadas de la Liga de la Leche
Francia, Paris, marzo 2005, publicadas en un monográfica de
dicha asociación. Este texto esta traducido por mí
y colgado en :
sites.google.com/site/rescatandotextos
La traducción de La liga de la leche de España presentada
en sus Jornadas de Bilbao, Noviembre 2005, contienen varias
decenas de errores en frases y conceptos importantes.

2) En cuanto a la expresión de Michel Odent
'eliminación de la madre':

es de su artículo ¿El Final del Asesinato de Cristo?, en la revista
L' Arc nº 73. Se puede descargar también en cstellano
(traducción de Jerónimo Bellido) en
sites.google.com/site/rescatandotextos

3) La expresión de Victoria Sau
es de su artículo en la revista Duoda:

La maternidad: una impostura; m = f (p)
(madre igual a función del padre), 1996.

4) La de Agustin Garcia Calvo:
es el título de su conferencia en el ciclo
sobre LA CONDICIÓN MASCULINA (1989) organizado por la
Asociación Antipatriarcal (del lado de los niños y de las
niñas) en colaboración con el departamento de Sociología IV
de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, de La Universidad
Complutense de Madridcuyo director era en aquellos años
JESUS IBAÑEZ, también ponente del ciclo.
Otro ponente fue el también fallecido JOSEP VINCENT MARQUES
(por cierto que el título de su ponencia también es jugoso por demás:

'La importancia de ser importante').

El ¡Pobres hombres! de Agustín hace referencia a lo que supone para
los hombres su condición patriarcal.